23 de junio de 2009

De la Suerte

No va a ser una reflexión inmensa.
Ni algo tan lindo como esto.
Es sólo que estoy obsesionada con eso de perder la razón.
Todo el mundo siempre dice que le tiene miedo a la locura cuando hace recuento de sus miedos.
Mi madre siempre lo ha puesto como el primero y el único.
Y todos "tenemos un poco de locos" (me recontrarecaga eso, los locos son pocos y los locos chidos son privilegiados, don't mess with it)
Pero la locura de verdad, esa si es aterradora.

Aunque, como bien dice Sofía, la locura es alejarte de la realidad y eso es bien relativo.
Tanto, que los parámetros de los gringos para encerrar a alguien en un manicomio son bien distintos que los de los ingleses, therefore, hay mucha gente sana en el gringo encerrada sin motivo, o hay muchos locos descarriados por la isla. Usté elige.

Pero estar loquito si implica dejar de funcionar y de cierta manera dejar de procurarte amor tangible. Igual en la cabeza estás convencido de ser feliz, pero no te ves de fuera. Ya no tienes la capacidad de hacerlo.
Eso me aterra. Más que nada en el mundo y en el futuro.

Pero más me aterra pensar que cierta gente cercana está chiflada y nadie se ha dado cuenta más que yo. Y aún si estuviera en lo correcto no podría ayudarle.
Y no por falta de huevos, más bien por ser una causa perdida absolutamente.

De lo de la suerte, creo que el concepto genera emociones bien opuestas porque todo depende de cómo te fue en el baile.
Y la vida está llena de altibajos y bla, pero en verdad, la suerte crea las pasiones más cabronas.
Sobre todo si estás obsesionado con ella y le concedes el control de tus esperanzas.
Como los fanáticos de los casinos.
Los que pierden todo lo que tienen y no le dicen a sus familias.
Lo que viven como ricos sin tener un peso y Las Vegas se nutre asquerosamente de aquello.
Las Vegas es la ciudad más falta de ética en el mundo.
Pero que deliciosa y fascinantísima resulta.
Por eso es que hay viejitas que pierden todo su varo y las herencias en las maquinitas de los tres dibujos en las que NUNCA se gana.

Hasta ahora entiendo la magnitud de un gambling problem.


Y por favor, por favor, si se me nota lo enferma hasta la preocupación, háganme el paro.
No me abandonen.
Me da más miedo estar sola que estar loca.

Buenas noches.
Un beso a las fichas.
Bye.

1 comentario:

  1. Me pasa siempre con tus posts que me gustan tanto que quiero comentar algo pero no sé qué carajo escribir aparte de "Aaaah!", "Uhhhhh!", "Buenísimo!!", lo que me hace desistir.

    Admito que tenía un par de meses de no entrar aquí (nos tuviste abandonados un tiempo a tus lectores?). Y ahora que entro veo esos textazos (se puede decir así?) mágicos, tristes y hermosos como éste, que agotan mi poca capacidad de escribir y me hacen decir:

    Ahhhh!!!! Uhhhh!!!

    Besos.

    ResponderEliminar