Quiero, quiero que me quieras quiero
Quiero que me abraces quiero
Que me quieras quiero
“Que bonita es mi vida bonita”. La nueva consentida escuchó las mismas palabras saliendo de mi boca hace algún tiempo. No que lo dijera al aire, pero no me lo había creído del todo. Como la vida, los días, las semanas y toda unidad de tiempo tienen sus altas y sus bajas. He llegado a la conclusión de que es mejor pensar en las altas y sonreírles, en verdad apreciar la vida bonita. Todo el tiempo hay pequeños destellos de colores, olores y dolores en la panza. No todo es una tragedia, y no. I’m not only happy when it rains.
Mi vida bonita, está más soleada que hace tiempo. He tenido mejores días, pero la temporada no pinta tan mal. Más bien, pinta luminosa.
Pero sin duda tengo mis quejas. La Seductra es de todo menos del club de los optimistas. Por eso antes de que nada, mis quejas de la semana:
1.Mi coche se descompuso el miércoles. Y el sábado antes que eso, y el fin de semana del 15 de septiembre…etc., etc., etc…Creo que es hora de que me resigne a que el reinado del Chococat todo terreno empieza a llegar a su fin.
2.Vienen mis exámenes. Tengo un putero de tarea que hacer. La semana de exámenes siempre me resulta tortuosa, estresante y por demás pesadillezca. No hay escapatoria, y sin duda voy a andar monstrueando haciendo las mil y un pendejadas escolares. Get ready. Una disculpa anticipada por mi futura conducta.
3.Mi lap está jodida. Más bien, la jodida pila, de la jodida lap está jodida. Dependo de la conexión del Lobo Feroz para poder usarla. Mencionado está de viaje y yo trabajo en otra máquina. Bloody Fantastic.
Volvamos a la vida bonita. Debo admitir que la primera mitad de semana no fue tan buena. A partir de la segunda parte todo ha ido mucho mejor. Si tuviera que elegir un día favorito, sería el que pasé con la nueva favorita. La chica de los ojos bonitos y el pelo con olor a recién bañado.
Vino a visitarme a mi alma matter (good time to laugh) y sorpresivamente entró hasta el corazón de la misma. Como tiene traumas por el maltrato injustificado del personal de seguridad en el pasado, decidió imponerse y entrar por la puerta grande.
Dado el paranoico estilo de cuidar la “seguridad” de todo miembro del instituto, la nueva favorita tuvo que dejar una identificación, que sólo sería devuelta a cambio de una firma de un ejecutivo. Mencionado ejecutivo, sería el encargado de proveer de informes a todo futuro aspirante a estudiante de la venerable y tecnológica institución.
Se nos hizo muy fácil namás pedir una firmita. Pues no. Que llegamos y que nos piden el nombre de la favorita. Y luego, su teléfono. Y que le dan una forma para llenar, y que la ponen en lista de espera. Y que la nueva favorita les dice puras mentiras. Y que tenemos que esperar 15 minutos para que la atendieran. Y que luego la Seductra se queda esperándola veinte más en lo que aquella recibía información completamente innecesaria. Y que el chistecito nos sale al revés y por mentirosas perdimos mucho tiempo. Finalmente nos reímos mucho. Decidimos tomarnos todo el día y como aristócratas de esos de Mr. Wilde nos fuimos a comer, tomar el té y echarnos una buena platicadita caminando y comiendo helados. Hacía mucho que no me sentía tan a gusto. Que no revaloraba lo maravilloso que es hacer llegar la verborrea, y que nos llegue la del otro. Gracias.
Caminamos por mi escuela vieja, por los mercados, por las calles y por la explanada. Luego cambiamos de paisaje y anduvimos por los pasillos, las escaleras, el subterráneo, y los edificios de un lugar muy especial.
En ese lugar se concentran muchas cosas. Hay muchos gatos. Tengo muchos recuerdos aislados de ahí. Recuerdo perfectamente lo que hice y con quien, sólo no me acuerdo cuando. Creo que eso es lo que tiene de especial. Convierte el tiempo.
Siempre he pensado que es nuevo, pero tiene alma de viejo. Está abierta a todos, pero pertenece a unos cuantos. Pertenece a los que usan zapatos de tela y bailan adentro, a los que cantan, los que se encierran en los cuartitos y tocan el violín. A los teatreros que andan por los jardines con delineador y cuernos y a los de las manos plásticas. A los arrogantes y magnéticos que hacen imágenes. Los “cineastas” en su cafetería de porquería con el pasto mal cortado y las pláticas pretenciosas. Todo ellos son los dueños. Los demás somos visitantes, pero nuestros anfitriones son tan cálidos, que nos hacen sentir parte de la familia.
The Madhouse: CNA. Con su esmeralda, su Cinemark, su CCC, sus actores, su tienda de bailarinas, su estacionamiento carísimo, y su sonido sin sonido. Cada vez que entro, me doy cuenta de lo mismo. El CNA no suena como otro lugar. La gente es silenciosa, la música se escucha lejana, las telas de los múltiples vestuarios se escucha cuando la mueve el viento. No hay gritos, no hay coches, no hay máquinas ni celulares. Es fantástico.
El motivo de nuestra visita fue la invitación de un personaje nuevo. La histriónica de rizos rojos. Mencionada chica es teatrera de primer año, y nos convocó a una puesta de los seniors. Vimos al absurdo Beckett representado por un grupo de actores maravillosos. Sin caer en detalles, lo pasé bien. Me gustó y mucho. Pero independientemente de la obra, lo que más disfruté fue ver a los teatreros en su nicho. They never stop performing. No son falsos, solo son circo, maroma, y claro teatro. Sonríen, se abrazan, comentan, se enojan, saludan y despiden para el público. El público que somos todo el resto de la humanidad que no es actor. Sin duda, llevan a la realidad aquello de que la vida es un escenario.
Terminado el performance sobre y fuera del escenario, fui a cenar con Ms. Yellow, la nueva favorita, y la histriónica de rizos rojos. La plática derivó (of course) en la vida amorosa y el futuro femeninos. Todas le tenemos el mismo miedo a la soledad y al fracaso. No estoy tan sola en mis debrayes. It feels less scary and lonely if everybody’s scared and alone right?
Llegó el viernes, y con el mucha felicidad “farandulera”. Fuimos convocadas Ms. Yellow et moi a entrevistar a una gran banda. Desde mi inexperto punto de vista, una verdadera banda mexicana de calidad. De las que yo si escucho, de las que es igual de buena que cualquiera de otro lado, de las muy pocas que propone, que tiene sus propio sonido, que es honesta, que no se repite y que se merece toda la atención que recibe. Con look de rockstars, cámara de vidio, actitud y charm norteño nos recibieron en las oficinas de Universal los Kinky. Que buena onda. En corto: Platicaron de la edición especial de Reina, ahora: Reina de Lujo. Excelente material con feel rosa mexicano, espuelas, electrónica and a lot of mexican coolnes. Viva la cultura fronteriza y sus gente pensante y talentosa.
Pasada la experiencia, nos retiramos a mangiare a un lugarcito digno de Don Corleone y su séquito mafioso. Buena comida italiana con vino en copas frías. Buena conversación en mesitas de madera y pisos de “tiles” rojos y blancos.
Nos echamos una caminadita, dimos varias vueltas por la ciudad (Queja numero 4. MALDITO TRÁFICO) y después de muchas aventuras terminamos la nueva consentida et moi en Pasagüero (check past posts) donde despedimos a Mormi no. 2 que va a reunirse con Mormi no. 1 y sus patines en las Españas. Suerte majas.
No pasaron veinte minutos cuando la comitiva partió. La histriónica de rizos rojos al frente de una caravana de muchas chicas bonitas y enojadas. Las invitaciones gratis nos llevaron a the Gotham City party. Ocho pisos de un gran edificio. Todos dedicados a la fiesta. Un conocido y poderoso patrocinador fue el encargado de un evento en el que la batalla de bandas fue el pretexto, Nortec la atracción, y mucho alcohol gratis el motivo. Como nunca. Mucha gente borracha, mucha gente caliente, mucho bailoteo, charcos de alcohol en el piso, tacones, tenis, mohawks, pelos verdes y amarillos. Carnaval nocturno, fiestero y de mucha perdición.
En contraste, el día de ayer, fui a festejar a Jimenitu. Comimos en su hogar como buenas personas que somos escuchando hits de hace once años para mi terror y paranoia personal. Como Jimenitu es una mujer sumamente organizada, partimos a las 8:30 en punto a un lugarcito que me ha parecido de lo mejor. Explotando al mexican curious, es un espacio de mucha estética kitsch, que ha contribuido a reanimar a Coyoacán. Gracias a dios, porque luego la condechi nos queda muy lejos. Half cantina, half bar buena ondita con meseros que bailotean enfundados en camisetas con print de guayabera, DJ que mezcla Funky Town y Madonna (por petición de una servidora) y sirve tragos que combinan bacacho blanco con Lulú de grosella. Una verdadera maravilla. El Jointcito buena onda de coyo: La Bipolar.
La noche empezó lenta, pero terminó sumamente bien. Gabyta y su hombre, rebautiazados Posh & Becks, su hermanita, la comitiva de Jimenitu, Meme, Ms. Yellow. Los Polvoras, Eri y su Inge y un Perro muy, muy borracho. Al respecto he concluido que el desencanto es reconfortante. Pero duele mucho. El escritor de la Sitcom juega con mi cabeza. Escribe lo que deseaba, pero no como lo deseaba.
La noche continuó con muchas sorpresas, reencuentros, nuevos amigos y una festejada muy contenta. Bailoteo de spring breaker, besuqueo con el meserito, vodka, vodka, vodka, Britney, Polvoreo de lo más revelador y una Brat de bufanda rosa que se le olvidaron las penas. Happy Birthday Sweetie.
Así, mi vida bonita es bipolar, teatrera, decadente a veces, llena de color y gente maravillosa.
Quiero, quiero que me toques
Quiero que me adores quiero
Que sin mi te mueras quiero
Quiero, quiero, Quiero.
Un beso grande y agradecido.
Bye.
“Te he conocido en tus momentos más negros, pero nunca habías estado tan irritante”- Chico diciéndole a su chica over pasta. (Overheard in Condesa.)
P.S. The Long and Winding Road y sus paradas:
The Madhouse:
CNA (Centro Nacional de las Artes)
Rio Churubusco
El Puritito Charm Norteño:
Kinky
www.myspace.com/kinky
www.kinkymusic.com
Don Corleone’s:
La Gloria
Michoacán No. 22, Col. Condesa
The Gotham City Party:
Vive Cuervo
http://www.cuervoespecial.com.mx/
El Jointcito buena ondita de Coyo:
La Bipolar
Malintizin 17, Coyoacán
Quiero que me abraces quiero
Que me quieras quiero
“Que bonita es mi vida bonita”. La nueva consentida escuchó las mismas palabras saliendo de mi boca hace algún tiempo. No que lo dijera al aire, pero no me lo había creído del todo. Como la vida, los días, las semanas y toda unidad de tiempo tienen sus altas y sus bajas. He llegado a la conclusión de que es mejor pensar en las altas y sonreírles, en verdad apreciar la vida bonita. Todo el tiempo hay pequeños destellos de colores, olores y dolores en la panza. No todo es una tragedia, y no. I’m not only happy when it rains.
Mi vida bonita, está más soleada que hace tiempo. He tenido mejores días, pero la temporada no pinta tan mal. Más bien, pinta luminosa.
Pero sin duda tengo mis quejas. La Seductra es de todo menos del club de los optimistas. Por eso antes de que nada, mis quejas de la semana:
1.Mi coche se descompuso el miércoles. Y el sábado antes que eso, y el fin de semana del 15 de septiembre…etc., etc., etc…Creo que es hora de que me resigne a que el reinado del Chococat todo terreno empieza a llegar a su fin.
2.Vienen mis exámenes. Tengo un putero de tarea que hacer. La semana de exámenes siempre me resulta tortuosa, estresante y por demás pesadillezca. No hay escapatoria, y sin duda voy a andar monstrueando haciendo las mil y un pendejadas escolares. Get ready. Una disculpa anticipada por mi futura conducta.
3.Mi lap está jodida. Más bien, la jodida pila, de la jodida lap está jodida. Dependo de la conexión del Lobo Feroz para poder usarla. Mencionado está de viaje y yo trabajo en otra máquina. Bloody Fantastic.
Volvamos a la vida bonita. Debo admitir que la primera mitad de semana no fue tan buena. A partir de la segunda parte todo ha ido mucho mejor. Si tuviera que elegir un día favorito, sería el que pasé con la nueva favorita. La chica de los ojos bonitos y el pelo con olor a recién bañado.
Vino a visitarme a mi alma matter (good time to laugh) y sorpresivamente entró hasta el corazón de la misma. Como tiene traumas por el maltrato injustificado del personal de seguridad en el pasado, decidió imponerse y entrar por la puerta grande.
Dado el paranoico estilo de cuidar la “seguridad” de todo miembro del instituto, la nueva favorita tuvo que dejar una identificación, que sólo sería devuelta a cambio de una firma de un ejecutivo. Mencionado ejecutivo, sería el encargado de proveer de informes a todo futuro aspirante a estudiante de la venerable y tecnológica institución.
Se nos hizo muy fácil namás pedir una firmita. Pues no. Que llegamos y que nos piden el nombre de la favorita. Y luego, su teléfono. Y que le dan una forma para llenar, y que la ponen en lista de espera. Y que la nueva favorita les dice puras mentiras. Y que tenemos que esperar 15 minutos para que la atendieran. Y que luego la Seductra se queda esperándola veinte más en lo que aquella recibía información completamente innecesaria. Y que el chistecito nos sale al revés y por mentirosas perdimos mucho tiempo. Finalmente nos reímos mucho. Decidimos tomarnos todo el día y como aristócratas de esos de Mr. Wilde nos fuimos a comer, tomar el té y echarnos una buena platicadita caminando y comiendo helados. Hacía mucho que no me sentía tan a gusto. Que no revaloraba lo maravilloso que es hacer llegar la verborrea, y que nos llegue la del otro. Gracias.
Caminamos por mi escuela vieja, por los mercados, por las calles y por la explanada. Luego cambiamos de paisaje y anduvimos por los pasillos, las escaleras, el subterráneo, y los edificios de un lugar muy especial.
En ese lugar se concentran muchas cosas. Hay muchos gatos. Tengo muchos recuerdos aislados de ahí. Recuerdo perfectamente lo que hice y con quien, sólo no me acuerdo cuando. Creo que eso es lo que tiene de especial. Convierte el tiempo.
Siempre he pensado que es nuevo, pero tiene alma de viejo. Está abierta a todos, pero pertenece a unos cuantos. Pertenece a los que usan zapatos de tela y bailan adentro, a los que cantan, los que se encierran en los cuartitos y tocan el violín. A los teatreros que andan por los jardines con delineador y cuernos y a los de las manos plásticas. A los arrogantes y magnéticos que hacen imágenes. Los “cineastas” en su cafetería de porquería con el pasto mal cortado y las pláticas pretenciosas. Todo ellos son los dueños. Los demás somos visitantes, pero nuestros anfitriones son tan cálidos, que nos hacen sentir parte de la familia.
The Madhouse: CNA. Con su esmeralda, su Cinemark, su CCC, sus actores, su tienda de bailarinas, su estacionamiento carísimo, y su sonido sin sonido. Cada vez que entro, me doy cuenta de lo mismo. El CNA no suena como otro lugar. La gente es silenciosa, la música se escucha lejana, las telas de los múltiples vestuarios se escucha cuando la mueve el viento. No hay gritos, no hay coches, no hay máquinas ni celulares. Es fantástico.
El motivo de nuestra visita fue la invitación de un personaje nuevo. La histriónica de rizos rojos. Mencionada chica es teatrera de primer año, y nos convocó a una puesta de los seniors. Vimos al absurdo Beckett representado por un grupo de actores maravillosos. Sin caer en detalles, lo pasé bien. Me gustó y mucho. Pero independientemente de la obra, lo que más disfruté fue ver a los teatreros en su nicho. They never stop performing. No son falsos, solo son circo, maroma, y claro teatro. Sonríen, se abrazan, comentan, se enojan, saludan y despiden para el público. El público que somos todo el resto de la humanidad que no es actor. Sin duda, llevan a la realidad aquello de que la vida es un escenario.
Terminado el performance sobre y fuera del escenario, fui a cenar con Ms. Yellow, la nueva favorita, y la histriónica de rizos rojos. La plática derivó (of course) en la vida amorosa y el futuro femeninos. Todas le tenemos el mismo miedo a la soledad y al fracaso. No estoy tan sola en mis debrayes. It feels less scary and lonely if everybody’s scared and alone right?
Llegó el viernes, y con el mucha felicidad “farandulera”. Fuimos convocadas Ms. Yellow et moi a entrevistar a una gran banda. Desde mi inexperto punto de vista, una verdadera banda mexicana de calidad. De las que yo si escucho, de las que es igual de buena que cualquiera de otro lado, de las muy pocas que propone, que tiene sus propio sonido, que es honesta, que no se repite y que se merece toda la atención que recibe. Con look de rockstars, cámara de vidio, actitud y charm norteño nos recibieron en las oficinas de Universal los Kinky. Que buena onda. En corto: Platicaron de la edición especial de Reina, ahora: Reina de Lujo. Excelente material con feel rosa mexicano, espuelas, electrónica and a lot of mexican coolnes. Viva la cultura fronteriza y sus gente pensante y talentosa.
Pasada la experiencia, nos retiramos a mangiare a un lugarcito digno de Don Corleone y su séquito mafioso. Buena comida italiana con vino en copas frías. Buena conversación en mesitas de madera y pisos de “tiles” rojos y blancos.
Nos echamos una caminadita, dimos varias vueltas por la ciudad (Queja numero 4. MALDITO TRÁFICO) y después de muchas aventuras terminamos la nueva consentida et moi en Pasagüero (check past posts) donde despedimos a Mormi no. 2 que va a reunirse con Mormi no. 1 y sus patines en las Españas. Suerte majas.
No pasaron veinte minutos cuando la comitiva partió. La histriónica de rizos rojos al frente de una caravana de muchas chicas bonitas y enojadas. Las invitaciones gratis nos llevaron a the Gotham City party. Ocho pisos de un gran edificio. Todos dedicados a la fiesta. Un conocido y poderoso patrocinador fue el encargado de un evento en el que la batalla de bandas fue el pretexto, Nortec la atracción, y mucho alcohol gratis el motivo. Como nunca. Mucha gente borracha, mucha gente caliente, mucho bailoteo, charcos de alcohol en el piso, tacones, tenis, mohawks, pelos verdes y amarillos. Carnaval nocturno, fiestero y de mucha perdición.
En contraste, el día de ayer, fui a festejar a Jimenitu. Comimos en su hogar como buenas personas que somos escuchando hits de hace once años para mi terror y paranoia personal. Como Jimenitu es una mujer sumamente organizada, partimos a las 8:30 en punto a un lugarcito que me ha parecido de lo mejor. Explotando al mexican curious, es un espacio de mucha estética kitsch, que ha contribuido a reanimar a Coyoacán. Gracias a dios, porque luego la condechi nos queda muy lejos. Half cantina, half bar buena ondita con meseros que bailotean enfundados en camisetas con print de guayabera, DJ que mezcla Funky Town y Madonna (por petición de una servidora) y sirve tragos que combinan bacacho blanco con Lulú de grosella. Una verdadera maravilla. El Jointcito buena onda de coyo: La Bipolar.
La noche empezó lenta, pero terminó sumamente bien. Gabyta y su hombre, rebautiazados Posh & Becks, su hermanita, la comitiva de Jimenitu, Meme, Ms. Yellow. Los Polvoras, Eri y su Inge y un Perro muy, muy borracho. Al respecto he concluido que el desencanto es reconfortante. Pero duele mucho. El escritor de la Sitcom juega con mi cabeza. Escribe lo que deseaba, pero no como lo deseaba.
La noche continuó con muchas sorpresas, reencuentros, nuevos amigos y una festejada muy contenta. Bailoteo de spring breaker, besuqueo con el meserito, vodka, vodka, vodka, Britney, Polvoreo de lo más revelador y una Brat de bufanda rosa que se le olvidaron las penas. Happy Birthday Sweetie.
Así, mi vida bonita es bipolar, teatrera, decadente a veces, llena de color y gente maravillosa.
Quiero, quiero que me toques
Quiero que me adores quiero
Que sin mi te mueras quiero
Quiero, quiero, Quiero.
Un beso grande y agradecido.
Bye.
“Te he conocido en tus momentos más negros, pero nunca habías estado tan irritante”- Chico diciéndole a su chica over pasta. (Overheard in Condesa.)
P.S. The Long and Winding Road y sus paradas:
The Madhouse:
CNA (Centro Nacional de las Artes)
Rio Churubusco
El Puritito Charm Norteño:
Kinky
www.myspace.com/kinky
www.kinkymusic.com
Don Corleone’s:
La Gloria
Michoacán No. 22, Col. Condesa
The Gotham City Party:
Vive Cuervo
http://www.cuervoespecial.com.mx/
El Jointcito buena ondita de Coyo:
La Bipolar
Malintizin 17, Coyoacán
dos cosas:
ResponderEliminar1) Entrevistaste a Kinky! Damn you!!
2) Yo también estuve en el battle of the bands/ Nortec!! Me habría gustado verte!!
bueno, una más: No me vayas a dejar plantada el miércoles ahora que tienes exámenes. Y si sí, al menos let me know!.
Muak!
En fin, gracias por todo, por venir y quedarte conmigo, por soportar mi incesante paranoia acerca de todo, mi falta de decisión y por comer los tacos mas ricos para los borrachos..
ResponderEliminarGracias por estar ahí conmigo y espero que te quedes mucho más tiempo conmigo...
Te quiero, mi cumple no hubiera sido lo mismo sin ti.. :D
Y si me bese al mesero.. jajaja tan guapo!!!
ufff que buenos fines tienes reina!! Kinky...dios mio, q fuerteee, debes pasarme el footage como sha! jaja, espero i ir el prox fin me urgeeee!
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