18 de noviembre de 2011

Me gusta

cuando sonríes. Cuando jalas hacia un lado los labios y empujas tus lentes hacia arriba porque invariablemente se están cayendo. Me gusta cuando haces ambas cosas al mismo tiempo.
Que el iris se te nubla en las orillas y creo que por eso no ves bien.
Tu cara cuando te digo guapo.
Me gusta que tus calcetines tengan hoyos.
Los dedos largos de tus manos tan suaves.
Que me despiertes en las mañanas.
Cuando te pones triste. Cuando estás contento. Cuando te lavas los dientes.
Que me digas "mi amor" cada dos cuadras. Que me cantes tangos cuando platicas. Que siempre me estás platicando algo. Que te rías de mis chistes. Como celebras tus propios chistes. Que me digas que te gusto.
Me gustan tus amigos.
Que cargues un libro a todos lados y escribas pedazos de cuentos en la libreta roja. La que no es Moleskin pero parece.
Me gusta el nombre que le pusiste a tu perro.
La ballena que quieres tatuarte aunque probablemente nunca lo hagas.
Cuando te salen moretones de hemofílico como el hijito de los zares. Me gusta imaginarte bailando polka en el infierno con los rusos cuando le das tragos a tu vodka con agua quina. Cuando me llevas a conocer a tu gran amigo, el mesero canoso de la Covadonga.
Quedarme con las ganas de que también lo hagas con "tu chile Pepe Vasconcelos".
Que colecciones cosas. Como los caballeros, las camisas de fútbol, los libritos de Borges y las nenorras del Cruz Azul.
Cuando escribes. Cuando no escribes. Cuando me enseñas lo que escribes.
Me gusta que me beses. Que me toques atrás de la cabeza cuando lo haces. Que siempre regreses una última vez antes de que cierre la puerta.
Me gustas.
Me gustas todo. Me gustas mucho.